El tema de la violencia contra la mujer es relativamente nuevo para mí, aunque es extremadamente viejo para el mundo.
Me ha costado años, libros, conversaciones, preguntas, apertura de cabeza, discusiones, juicios (de mi parte hacia otras personas y al revés), bromas sin sentido (hechas por mí y hacia mí), recuerdos dolorosos, respuestas machistas frente a mis propias vivencias, justificaciones de violencia, y mil cosas más, EMPEZAR A ENTENDERLA. Y lo pongo en mayúsculas porque es un tema tan profundo, tan arraigado, tan normalizado, que incluso cuando empiezas a darte cuenta de que existe y de que es un problema colectivo, sigues siendo parte de él, porque es un PROCESO largo y personal.
Esta conversación de hoy me hizo entender un poquito más del tema. Caminar un poco más hacia la concienciación de este problema. Me hizo verme a mi misma, en el pasado, ejerciendo violencia contra otras mujeres (y preguntando en esta entrevista si esto será posible). Me recordó a una Nicole que ha tenido su propio proceso para entender esto, que ha generado violencia y que ha sido víctima de violencia. Dolorosa y triste, y mucho más cuando “no es para tanto, exagerada”. ¿Cuánto es, entonces para tanto?. Me recordó a esos cientos de momentos con María Gracia, mi mejor amiga, quien con paciencia infinita se ha sentado desde hace un par de años a explicarme paso a paso de qué se trata todo esto, ayudándome a ver más allá de mi propio metro cuadrado y a dejar la arrogancia con la que muchas veces hablamos del tema: DESDE AFUERA, CLARO. Me recordó a mi yo de hace unos años escribiendo y alabando al amor romántico, sin cuestionar nada y a mi yo de hace un par de años diciendo: “pero si a mi me gusta ser romántica, ¿por qué se sataniza esto del amor romántico?”. Hoy me alegra estar abierta de mente, alma y corazón a seguir aprendiendo de este tema. ¡Me alegra y me duele! Porque mientras más abro los ojos más me comprometo, pero al mismo tiempo, más me lastima ver todo eso que pasa y que aún no logramos dimensionar. Y que nos hace daño.
Pero bueno, más allá de estas reflexiones personales (me emocioné escribiendo), quiero agradecer a mi invitada de hoy, Grettel Salazar, una mujer maravillosa que comparte con una claridad indiscutible muchos conceptos e ideas sobre este tema. Que maravilla poder seguir aprendiendo de esto, poder contar con una vocera de este nivel y poder seguir aportando a que este contenido nos lleve a la concienciación y a la reflexión.
Este es un episodio que espero que mucha gente escuche y que toque muchas conciencias y corazones. Gracias, Gre, por aceptar ser parte de este espacio y despertarnos tantas reflexiones. Comparto aquí un texto íntegro de Grettel, el que fue escrito hace un par de meses en sus redes sociales, a propósito de un femicidio, y lo acompaño de una sola pregunta: ¿es esto una exageración? La respuesta, en tu propio interior.
Por: Grettel Salazar. Fuente: Facebook.
“Mi sobrina de 7 años pregunta: ¨¿Qué están dando en la tv, por qué están buscando a Allison? Ojalá que esté bien.¨ Nos dice.
¿Cómo le digo que no?
Que Allison está muerta. Que podría ser ella. Que podría ser yo.
Que Allison, ella, y yo tenemos algo en común: un cuerpo que tiene una vagina. Que eso, está demostrado estadísticamente, es motivo suficiente para que corramos más peligro de muerte y de violencias basadas en nuestro sexo (en una característica biológica).
¿Cómo le digo que a las mujeres nos matan todos los días? Que nos matan los vecinos, los familiares y los amigos. Y también los desconocidos. Que cuando no nos matan, nos violan, nos abusan, nos gritan cosas en la calle, comparten fotos nuestras sin nuestro consentimiento, nos dicen cómo vestirnos y cómo comportarnos, nos pagan menos o se ríen del trabajo doméstico que no nos pagan.
Cómo le digo que sí, que a los hombres también los matan, pero por razones diferentes que a nosotras y que normalmente (leáse normalmente, no dice siempre acá por si acaso) los matan otros hombres. ¿Cómo le digo que no, que el riesgo no es igual para mujeres y para hombres porque la proporción de casos y la investigación profunda sobre las causas de homicidios en el mundo señalan con claridad que ser mujer te expone desproporcionadamente a ser la víctima cuando la razón de la violencia se relaciona con el sexo o con el género?
¿Cómo le digo que hemos creado una humanidad que enseña a los hombres a matar cuando no obtienen lo que quieren? Y que no, claro, no todos los hombres matan, pero si a todas las mujeres nos ha violentado alguno en algún momento de la vida. Y por lo tanto, la conclusión lógica, pero también científica, es que la posibilidad de que a ella también le inflijan algún tipo de violencia contra las mujeres en algún momento de su vida, es altísima.
¿Cómo le digo que a pesar de todo lo doloroso que es el mundo para las mujeres mis amigos siguen compartiendo chistes machistas en sus redes porque están convencidos de que ¨solo son chistes¨? Que hay gente que predica que el feminismo es demasiado radical o hasta satánico. Y también hay gente a la que solo le importan las vidas de las mujeres cercanas a ellxs, como si ser personas no fuera suficiente para importar.
¿Cómo le digo que no es un hecho aislado, sino un sistema que se llama patriarcado? Que encarcelar a un femicida es importante pero no suficiente, porque transformar los patrones estructurales de distribución del poder y los esquemas de relacionamiento cotidianos basados en la socialización de género es lo fundamental y que para eso falta rato, faltan luchas… y faltan vidas.
No le cuento nada de eso. Tiene 7 años. La abrazo. Le digo que le prometo que en el mundo hay muchas personas trabajando fuerte para que esto deje de pasar. Me dice que salir a la calle cuando quieras y que no te pase nada es un derecho. Le digo que me alegra que lo tenga claro y que también es un derecho estar a salvo si decides quedarte en casa. Nos volvemos a abrazar y quisiera que la seguridad de ese abrazo nos dure para siempre.”
¡Conoce más de lo que hablamos en este episodio!
- Grettel Salazar tiene 35 años y vive en Costa Rica. Es psicóloga orientada al trabajo social comunitario y derechos humanos, feminista y activista. Pueden seguirla en su Instagram personal @gresalazar
- Es parte del proyecto Yo no era feminista, que nació en Chile, en 2018, con la idea de mostrar “¿Cómo, cuándo, dónde, por qué… una ¨se vuelve¨ feminista?” a través de “relatos que responden esta pregunta desde la intimidad de cada experiencia”. Si quieres más información puedes visitar su web, seguirlas en Instagram (Gre es la CM de este proyecto, como un dato importante) o ser parte de él al enviar tu relato o ilustración para que sea publicada en el blog
- Este es el último relato de Grettel para Yo no era feminista: https://www.yonoerafeminista.com/post/grettel-salazar-chac%C3%B3n-costa-rica
- Libros recomendados:
- Una habitación propia de Virginia Wolf
- Autobiografía de Angela Davis
- Historias de Mujeres de Rosa Montero
- El Segundo Sexo de Simone de Beauvoir
- Algunos artículos interesantes recomendados por Grettel para ampliar esta información:
- Hechos y cifras: poner fin a la violencia contra las mujeres
- Infografía interactiva sobre la violencia contra las mujeres (¡Está muy, muy buena!)
- Un mundo sin (casi) presidentas, para ahondar un poco más sobre el tema de la paridad en altos mandos que evidencia la brecha de género existente en este tema.
- Global database on violence against woman (artículo en inglés que muestra la situación de violencia contra la mujer en el mundo.
Gracias por estar aquí.
Hasta la próxima semana,
nicole