La ausencia del padre o de la madre, por la circunstancia que sea, provoca un dolor profundo que se manifiesta de formas muy diferentes pero que, en cualquier caso, lastima. A veces esas heridas están abiertas mucho tiempo, y nos hieren más y más cada vez. Otras veces aprendemos a vivir con ellas, a entenderlas, a reconocerlas y a hacerlas parte de nuestra vida para, con eso, lograr que vayan cicatrizando poco a poco. Aunque siempre recordemos esa vivencia, debemos reconocer que la aceptación nos da la posibilidad de avanzar con nuestra vida y seguir con nuestro camino, sin fingir que la herida no existió, sino haciéndola parte de lo que somos, de nuestra esencia e incluso de nuestra felicidad. 

A pesar de que somos amigas desde hace muchos años y de que sabemos las vivencias más profundas la una de la otra, nunca nos habíamos sentado a hablar de este tema: la ausencia del padre biológico de mi amiga, quien decidió no estar presente en su crianza. Hoy, desde este espacio, con todo el respeto y cariño que nos tenemos, Pau y yo decidimos hacerlo juntas, públicamente, con la idea de empezar a hablar, que es lo que siempre hemos dicho que hace falta, sobre todo de estos temas que incomodan tanto. Creemos que es hora de romper con los tabúes y transformarlos en fortalezas, como ella lo hizo.

Su historia representa no solo la de muchas hijas e hijos que han crecido sin su papá, sino también la de muchas mujeres que han tenido que sacar adelante a sus hijos solas, con todo lo que eso implica en una sociedad todavía muy machista, en la que, en general, para una mujer todo es un poco más complicado, aunque eso aún a algunas personas les cueste comprender. Tristemente, está normalizado que un hombre abandone a una mujer embarazada o con un hijo/a y está totalmente repudiado cuando es al revés que, estadísticamente, es mucho menos frecuente. Aunque en ninguno de los casos es comprensible ni aceptable, como dice Pau, deben haber razones muy poderosas para tomar esas decisiones y es mejor quedarnos en un lugar sin juzgar, pero haciendo consciencia de lo importante de no repetir.

En esta entrevista hay muchos mensajes para reflexionar más allá de su literalidad, sobre todo cuando al regresar a ver a nuestro alrededor conocemos a más de una mujer que ha criado sola a su hijo/a. Sin embargo, esas historias que parten de momentos llenos de dolor, también nos muestran la cara inmensa del amor cuando hay familias enteras esperando y apoyando la llegada y crianza del bebé, cuando hay hombres maravillosos que deciden ser papás más allá de un vínculo biológico y cuando hay madres increíbles que logran generar conexiones tan fuertes con sus pequeños/as que, aunque no van a reemplazar a un padre, nos muestran cuán grande es el amor, aún en las más adversas circunstancias.

Es hermoso saber que esta historia tiene este trayecto feliz y que esa familia que Pau concibió de dos (ella y su mamá) se amplió con la presencia de Sergio, quien con su frescura, humor y sonrisa, se convirtió, por derecho, en el papá de Pau y en el abuelo de Ezequiel.  Su fuerza, resiliencia, optimismo y amor por la vida han hecho de ella una mujer feliz que, sin negar su origen, ha aprendido y ha podido construir su propia historia, una llena de fuerza, unión y felicidad que hoy comparte con su marido y el pequeño Eze.

Que este episodio te deje muchas reflexiones, sobre todo para ver con otros ojos eso que hemos normalizado y que nos sigue lastimando como sociedad, como familia, como mujeres, como madres y como hijas e hijos. 

¡Aquí más fotos de Pau y su familia!

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Con un abrazo,

nicole

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¡Conoce más de todo lo que hablamos en el episodio!

• Pau tiene 37 años, trabaja en una Universidad de Quito y hace un casi un año se convirtió en la mamá de Ezequiel.
• Su lema es que la vida es demasiado corta para quejarse y sufrir y que hay que vivir como si fuera el último momento. Siempre intenta ver el vaso medio lleno.
• En sus tiempos libres practica yoga y meditación. Desde la llegada de su bebé ha incursionado en el mundo de recetas saludables y veganas, ¡una forma más de cuidar su salud!
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